Artista chilena-israelí radicada actualmente en Miami, FL. Crea esculturas y obras de instalación combinando objetos encontrados y materiales listos para usar con tejidos coloridos, texturizados y a veces luminiscentes.

A través de una práctica de recolección y reutilización, acumula materiales sin un propósito específico en mente, excepto tenerlos a mano y disponibles para dar forma sutil a la creación de sus obras. Materiales recurrentes como pelotas de yoga, flotadores de piscina, purpurina, cuerdas, hula-hoops y también sus tejidos terminados, se reutilizan una y otra vez en el tiempo. Lo que una vez fue presentado como una obra terminada puede fácilmente convertirse más adelante en un punto de partida para una nueva obra. Nada es permanente, todo se transforma. Su proceso es a la vez un acto de apropiación artística sobre sus materiales, así como una exploración lúdica de las infinitas posibilidades que le ofrecen.

Treizman examina críticamente el hiperconsumismo, pero al mismo tiempo, paradójicamente, participa en él, utilizando bienes comerciales y la cultura desechable para crear su obra. Expone su propia forma de lidiar con el exceso: por un lado, cuestiona la verdadera necesidad de que existan materiales de un solo uso con patrones vibrantes, como cinta adhesiva estampada con flamencos rosados o burbujas de plástico violetas. Por otro lado, encuentra estos materiales lúdicos absolutamente irresistibles. Al incorporarlos en sus instalaciones de objetos encontrados y tejidos no convencionales, invita al espectador a reflexionar sobre la sociedad de producción masiva en la que vivimos.